CinEncanto
La Butaca
Novedades
Películas Recientes
Archivo
La Butaca
Noticias

Crítica por Rubén Corral

Una película ciertamente extraña. “Aro Tolbukhin. En la mente del asesino”, dirigida por tres personas, es una novedosa combinación de géneros. Según afirmaba Zimmermann con motivo de la presentación del film en el festival de San Sebastián, se trata de un “ejercicio para investigar en el lenguaje cinematográfico, para combinar géneros”. Porque, efectivamente en “Aro Tolbukhin” se dan cita fragmentos documentales, entrevistas y (re)construcción de hechos que tienen como referente una base supuestamente real.

En cualquier caso, lo que más curiosidad provocará al espectador de la película es saber si la trama que aquí se narra ora como documental ora como ficción obedece a motivos de creación o de recreación. Es decir, ¿existió Aro Tolbukhin, un marino mercante húngaro que quemó vivas a siete personas en una misión guatemalteca y que fue ejecutado por la justicia de ese país por estos crímenes? Ocurre, de manera ya casi recurrente en una rama del documental, que no resulta tan interesante la recreación de hechos acaecidos en la realidad, a la manera tradicional del documental, sino que se siente más atraída por la estética del documental. Se trata, en definitiva, de contaminarlo, una práctica que a algunos quizá les parezca bárbara (si son feligreses del modo etnicista de entender el documental a la Jean Rouch), pero que está acaparando el interés de los más prestigiosos cultivadores del género.

Porque con este uso del documental lo que se hace, a fin de cuentas, es tratarlo como si fuera un género dentro del cine. Al menos si entendemos por género una serie de códigos estéticos característicos. De este modo, cualquier asunto puede ser tratado desde un punto de vista documental: que sea verdad o mentira es un problema no menor, aunque en todo caso de relevancia en un estrato diferente de la significación.

“Aro Tolbukhin” viene a unirse, en los estrechos márgenes del documental español, a otras experiencias como la genial “Tren de sombras”, de José Luis Guerín, “Cravan vs. Cravan”, de Isaki Lacuesta o “Ataúdes de luz”, de Nacho Cerdá (los dos últimos, si bien se estrenarán más tarde, llevan más tiempo de “cocción”). Sin embargo, y a diferencia de muchos de estos trabajos citados, así como a diferencia de buena parte de los documentales más interesantes del cine español reciente, “Aro Tolbukhin” se centra tanto en la creación de una realidad propia, en la elaboración de una coartada verosímil para el espectador quisquilloso que termina perdiendo de vista su propio rumbo. De este modo, si con películas como “El sol del membrillo” o “Mones com la Becky”, el espectador se iba a casa tan contento con un saco lleno de reflexiones ajenas y propias, ante el logrado tra-bajo de Villaronga, Racine y Zimmermann la sensación es otra muy distinta. El espectador termina la proyección y duda acerca de la existencia o no del protagonista, duda sobre si creer toda la historia, pero sobre todo duda sobre si la anécdota era lo suficientemente interesante como para haberla visto. Como si el género documental ya hubiera caído en la rutina, como si ya se hubiera convertido en un fin en sí mismo, como si se lo pasaran mejor haciendo la película los autores que los espectadores viéndola.

© 2002 Rubén Corral

La Butaca

Aro Tolbukhin: En la Mente del Asesino
(Aro Tolbukhin: En la Mente del Asesino)


Imagen © 2002

Dirección y guión: Agustí Villaronga, Lydia Zimmermann y Isaac P.
Racine.
Año: 2002.
Países: España y México.
Duración: 95 min.
Interpretación: Daniel Giménez Cacho (Aro adulto), Carmen Beato
(Carmen), Zoltan Jozan (Aro adolescente), Mariona Castillo (Selma
adolescente), Aram González (Aro niño), Eva Fortea (Selma niña). Jesús Ramos (Padre), Pepa Charro (Tata).
Producción: Antonio Chavarrías.
Música: José Manuel Pagán.
Fotografía: Guillermo Granillo.
Montaje: Ernest Blasi.
Dirección artística: Margalida Obrador y Lorenza Manrique.
Vestuario: Antònia Marqués y Lourdes del Valle.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

.