Mystery Science
Theater 3000: The Movie
Cannibal Women in the Avocado Jungle of Death
Monty Python
and the Holy Grail
Killer Klowns
From Outer Space
Beyond the Valley
of the Dolls
Dirigida
y escrita por Clive Barker
Editada por Richard Marden
Elenco:
Andrew Robinson .... Larry Cotton
Clare Higgins .... Julia Cotton
Ashley Laurence .... Kirsty Cotton
Sean Chapman .... Frank Cotton
Oliver Smith .... Frank (sin piel)
Robert Hines .... Steve
Doug Bradley .... Cenobita líder
Nicholas Vince .... Chatterer
Simon Bamford .... Butterball
Grace Kirby .... Cenobita mujer
Todo aficionado al terror literario conoce a Clive Barker (y si no, deberían conocerlo). Stephen King, decano del género, alguna vez comentó "He visto el futuro del terror, y su nombre es Clive Barker". Con sus famosos (o infames) "Libros de Sangre", este autor británico contribuyó enormemente al renacimiento del género a principios de los ochentas, influyendo poderosamente en la creación del movimiento "splatterpunk", que buscaba la creación de obras donde se balancearan argumentos inteligentes con las más cruentas formas de horror visceral.
Pero por más que lo intentaran, los discípulos de esa corriente nunca estuvieron siquiera cerca de igualar a Barker, quien con cuentos cortos como "The Midnight Meat Train", "In the Hills the Cities" y "Dread", probó que aún no estaba muerta la innovación en la literatura, especialmente en un género tan cansado como el terror.
Esta
explosión de fama y notoriedad ayudó a impulsar a Barker en
terrenos distintos de la literatura. Así, su incipiente imperio abarcó
desde comics hasta juguetes y películas, de las cuales ha dirigido
tres hasta la fecha ("Hellraiser", de 1987; "Nightbreed",
de 1990 y "Lord of Illusions", de 1995). Pocos autores han logrado
adaptar y dirigir sus obras en cine, y de ese reducido número, Barker
ha sido uno de los que mayor éxito ha tenido, tal vez no económico,
pero sí artístico, traduciendo a imágenes sus exóticas
ideas con integridad y abundante visión estética.
En un ambiente saturado de asesinos enmascarados (clones de "Viernes 13") y de genéricos monstruos (copias desvergonzadas de "Alien"), Clive Barker presentó su ópera prima de largo metraje, "Hellraiser", cuyo tono y seriedad estaba muy por encima del fácil producto fílmico dirigido a adolescentes. Empleando temas adultos y personajes creíbles, "Hellraiser" fue tal vez demasiado intensa para las audiencias acostumbradas al predecible terror cinematográfico de la época, y aunque no tuvo gran éxito en taquilla, ha permanecido durante casi dos décadas como una joya de culto que aún se admira entre los aficionados al cine de terror.
"Hellraiser",
basada en el cuento corto "The Hellbound Heart", empieza con una
enigmática escena donde un hombre adquiere una extraña caja
negra, aproximadamente del tamaño de un puño y adornada por
curiosas filigranas doradas. Luego, en un cuarto vacío, el hombre manipula
la caja, que resulta ser un acertijo que, una vez resuelto, permite la entrada
de extrañas criaturas a nuestro mundo. Estos seres, "ángeles
para unos, demonios para otros", ofrecen al hombre la máxima experiencia
sensorial, donde el placer y el dolor son indistinguibles uno del otro. Sobra
decir que la experiencia no termina de forma agradable.
Un
tiempo después, la familia Cotton se muda a la casa donde tuvo lugar
aquel evento. La casa pertenece a Larry (Andrew Robinson), y el hombre que
en ella desapareció resulta ser su hermano Frank. Junto con Larry llega
su esposa Julia (Clare Higgins) y su hija Kirsty (Ashley Laurence). Lo que
Larry no sabe, es que su esposa Julia tuvo un breve pero intenso romance con
Frank, por lo que ella se ha vuelto distante y fría con su legítimo
esposo. Durante la mudanza, Larry sufre una herida en la mano, y parte de
su sangre cae al piso del cuarto, ahora vacío, donde Frank realizó
su extraño ritual. La sangre se filtra bajo las tablas del suelo e
inicia la resurrección de Frank... o lo que queda de él, pues
cuando recupera la conciencia, se trata de algo más que un esqueleto
humano con un esbozo de músculos y órganos; la sangre de Larry
no fue suficiente para restituir a Frank a una forma totalmente humana, y
para lograrlo necesitará más sangre. Afortunadamente para él,
Julia descubre al monstruo, y a pesar de su horror inicial, accede a llevar
víctimas para que Frank complete su resurrección. Mientras tanto,
Kirsty sospecha que algo raro ocurre en la casa, y cuando descubre la caja
negra, sin darse cuenta atrae a las criaturas que se llevaron a su tío.
Para evitar sufrir el mismo destino que Frank, Kirsty debe hacer un trato
con ellos, pero tal vez ni eso logre salvarla de sus bizarros propósitos...
Tal
vez una fría sinopsis de la película no logre expresar su sombrío
tono, ni la grotesca estética que Barker aplica a sus creaciones. Y
no hay duda de que la narrativa tropieza en un par de ocasiones, particularmente
al final, donde la resolución es un tanto arbitraria y hasta absurda.
Pero el valor de "Hellraiser" no está en sus detalles dramáticos
(aunque tiene mucho de bueno en ese aspecto), sino en la conjunción
de sensibilidades opuestas para crear una experiencia fascinante, rara vez
vista en el cine y mucho menos en el cine de terror.
Tal conjunción se puede ver en varios niveles. El más obvio (y el más efectivo) está reflejado en la violencia de la película y en sus extrañas criaturas. Combinando la estética de la cultura sadomasoquista con una etérea e inexplicable belleza, las creaciones de Barker reflejan la experiencia sensual en sus extremos. La dicotomía placer-dolor puede ser molesta para algunas personas, pero el ver esta idea encarnada en un grupo de criaturas que producen en el espectador un similar efecto de atracción-repulsión es ciertamente impactante, y claro testimonio de que, a pesar de ser un director novicio, Barker tenía perfectamente definidas las metas de la película, a pesar de sus ocasionales traspiés dramáticos.
Esa
misma dicotomía se manifiesta en el argumento y en las actitudes de
los personajes. Julia está atrapada entre el deseo de un hombre peligroso
y atractivo, como Frank, y un hombre débil, pero confiable como Larry.
Aunque ostensiblemente Kirsty es la heroína de la película,
Julia es el eje y motor de la trama, y son sus deseos lo que mueve la historia.
Aunque "Hellraiser" nunca tuvo gran éxito comercial, atrajo a un público lo suficientemente variado como para garantizar una serie de secuelas, cada una más mediocre que la anterior, convirtiendo en héroe a "Pinhead", el líder de las demoníacas criaturas denominadas "cenobitas" (una antigua palabra que denota a un fraile o ministro). Aunque tienen algunos puntos buenos, tales secuelas diluyen la estética e intención original de Barker para convertirse en genéricas cintas de terror. Pero quienes busquen auténticas secuelas de "Hellraiser" harán bien en buscar los comics que a fines de los ochentas publicó la editorial Epic (propiedad de Marvel Comics). Los escritores y artistas de esas historias entendieron perfectamente las ideas de Barker, y continuaron la fascinante mitología sugerida por las obras del autor.
Desafortunadamente,
a lo largo de los años Clive Barker ha abandonado el género
del terror, centrándose más en fantasía adulta, la cual
es igualmente brillante, pero no tan subversiva e impactante como sus primeras
obras de terror. De cualquier forma, siempre quedará "Hellraiser"
como una diestra unión de cine y literatura, en la que el perturbador
balance de sobrio drama y sangriento espectáculo evoca su mensaje mismo:
los extremos de la experiencia humana no sólo se tocan, sino que se
confunden para quienes tengan el valor de internarse en sus más remotas
regiones.
Imágenes
cortesía de The
Unofficial Hellraiser Website