Mystery Science
Theater 3000: The Movie
Cannibal Women in the Avocado Jungle of Death
Monty Python
and the Holy Grail
Killer Klowns
From Outer Space
Beyond the Valley
of the Dolls
Dirigida
por Rachel Talalay
Escrita por Tedi Sarafian, basado en el comic de Alan Martin y Jamie Hewlett
Editada por James R. Symons
Elenco:
Lori Petty .... Tank Girl
Ice-T .... T-Saint
Naomi Watts .... Jet Girl
Don Harvey .... Sgt. Small
Jeff Kober .... Booga
Reg E. Cathey .... Deetee
Scott Coffey .... Donner
Malcolm McDowell .... Kesslee
Aunque me acepto culpable de disfrutar intensamente de muchas películas universalmente consideradas como bodrios y pura basura fílmica, existen entre mis favoritas algunas que no considero realmente malas, sino incomprendidas.
Entre ellas podría mencionar "The Adventures of Buckaroo Banzai Across the Eighth Dimension", "Showgirls" y, evidentemente, "Tank Girl".
Basada
en el comic británico del mismo nombre, "Tank Girl" sigue
las aventuras de una exuberante e irreverente mujer en un futuro distópico
donde, luego del impacto de un cometa, la Tierra se ha convertido en un desierto
donde el agua es el mayor tesoro. Los últimos vestigios de civilización
están representados por una malévola corporación, dirigida
por el villano Keslee (Malcolm McDowell), quien controla (o intenta controlar)
el suministro de agua. Pero los desiertos del planeta están habitados
por pequeñas comunidades rebeldes que se oponen a la opresión
de la corporación, y es en una de esas comunidades donde habita Rebecca
(Lori Petty), quien presencia la destrucción de su hogar a manos de
los soldados corporativos. Buscando venganza, la joven contraataca, y elimina
a muchos soldados antes de ser capturada. Keslee queda impresionado por la
habilidad de la mujer, y le ofrece trabajo como miembro de su ejército.
Rebecca rehúsa, por supuesto, y es condenada a trabajos forzados en
las minas de la corporación. Entonces, con ayuda de un tanque semi-inteligente
y de la tímida, pero mecánicamente hábil Jet-Girl (Naomi
Watts), Rebecca escapa y, bajo el nombre de Tank Girl decide destruir la corporación.
Sin embargo, sus planes se detienen cuando Tank Girl y Jet Girl son capturadas
por los feroces Rippers, demoníacas criaturas responsables por feroces
ataques en el desierto. Pero cuando se revela la naturaleza real de tales
"monstruos", Tank Girl decide usarlos como aliados en la batalla,
que podría determinar el futuro de la escasa humanidad independiente
que aún habita el planeta...
Quizás
esto suena como una especie de Mad Max disfuncional, pero en el fondo se trata
de una comedia donde el humor gira en torno a las irreverentes e impredecibles
reacciones que Tank Girl muestra respecto a su entorno, sus enemigos... y,
por supuesto, su querido tanque. Nada en la película se toma en serio,
y es ese irrefrenable humor y energía lo que realmente conduce la película.
El guión es una mera excusa para hacer chistes y lucir la personalidad
de la protagonista, aunque también hay bastante humor por parte de
los "Rippers", que resultan ser canguros humanoides, con personalidades
bizarras y graciosas.
La actriz Lori Petty presenta una interpretación absolutamente perfecta de Tank Girl, convertida en un auténtico personaje de comic, pero de carne y hueso. Y no sólo me refiero a la caracterización física, con su exuberante vestuario y agresivo peinado, sino al sentido del humor que muestra, y el tácito entendimiento hasta de los más bizarros diálogos que el guión le asigna. Ice-T, como el canguro T-Saint, presenta su usual estilo "gangsta", que se complementa muy bien con Jeff Kober en el papel de un atolondrado perro-canguro, y con Reg E. Cathey como un filósofo-guerrero que sigue aún las enseñanzas de su ídolo, Jack Kerouac.
También de interés es la participación de Naomi Watts como Jet Girl, quien comienza como una tímida mecánica en las minas de los villanos, antes de que la influencia de Tank Girl la convierta en otra súper-heroína feminista, extrovertida y auto-suficiente.
Allá
por 1995, la directora Rachel Talalay tenía en su haber dos películas
francamente mediocres: "Freddie's Dead: The Final Nightmare", de
1991, y "Ghost in the Machine", de 1993. Pero no fue sino hasta
"Tank Girl" cuando aparentemente Talalay floreció como una
directora con la visión necesaria para extraer la esencia del comic
de Jamie Hewlett y Alan Martin (quienes ahora, diez años después,
regresaron a la fama como parte del equipo creativo de la banda musical "Gorillaz")
y traducirlo a la pantalla grande, con todas las herramientas audiovisuales
posibles, ya que la película combina animación, cuadros del
comic mismo y muy imaginativos efectos especiales (cortesía de los
hermanos Skotak), que tal vez no sean muy realistas, pero que definitivamente
embonan a la perfección en la excéntrica estética visual
de la cinta.
Además,
a modo de apología por el irregular libreto, la directora ha denunciado
en numerosas ocasiones la influencia negativa que el estudio tuvo sobre su
obra, obligándola a re-editar la película y cortar escenas importantes.
Algunas de estas escenas se pueden encontrar en la página web de Talalay,
y aunque es material en video de baja calidad, se puede notar el potencial
de una "versión del director" de esta menospreciada película.
La música también es parte esencial de la experiencia, gracias a que la notoria Courtney Love-Cobain se encargó de supervisar la banda sonora de la película, creando un ensamble de estilos y canciones que van desde la melancólica "Roads", de Portishead, hasta un demencial número musical (con baile y todo) de la clásica "Let's Do It", de Cole Porter. Ice-T, desde luego, también contribuye con una canción que hace gala de su conocido estilo.
Creo
que no es posible convencer a alguien, sólo con palabras, sobre las
bondades que ofrece la película "Tank Girl". Hasta no verla
se podrá saber si el espectador responde positivamente a la abigarrada
combinación de irreverente humor, clichés de ciencia ficción,
y un estilo tan energético que sus excesos se transforman simultáneamente
en su principal defecto y virtud. La explosión del video casero ha
abaratado mucho el calificativo de "cine de culto", pero "Tank
Girl" es una de las pocas películas que genuinamente lo merecen.
Y como tal, quizás no sea para todos los gustos, pero quienes logren
asimilarla encontrarán una experiencia fílmica única
y muy divertida. O, mejor aún, podrían verse inspirados para
leer el comic original, aún subversivo y único a pesar de los
años... por no mencionar que ya no verán a los canguros de la
misma manera.
Imágenes
cortesía de MGM