Dirigida
por John Lee Hancock
Escrita por Leslie Bohem, Stephen Gaghan y John Lee Hancock
Editada por Eric L. Beason y Paul Covington
Elenco:
Dennis Quaid .... Gen. Houston
Billy Bob Thornton .... Davy Crockett
Jason Patric .... James Bowie
Patrick Wilson .... Cnel. Travis
Emilio Echevarría .... Santa Anna
Jordi Mollà .... Juan Seguin
Laura Clifton .... Susanna Dickinson
¿Dónde acaba la licencia dramática y comienza el revisionismo histórico? Me hice esta pregunta varias veces durante "El Álamo", pero luego de un rato me di cuenta de que la respuesta es irrelevante, por lo menos dentro del cine. Si es difícil creer lo que dicen los medios informativos (supuestamente fundamentados en "la verdad"), con más razón debemos dudar de un medio como el cine, tradicionalmente dedicado a manipular la historia y crear ficción para entretenimiento del público. Por eso, quien pretenda recibir lecciones de historia viendo una película, estará cayendo en un penoso error. Y aunque aprecio mucho la proposición de ideas mientras veo una película, es indudable que su motivación principal es entretenernos. Por eso, independientemente de su rigor académico, o de su veracidad al retratar famosas figuras históricas, "El Álamo" es una película razonablemente recomendable.
Pero no por ello es perfecta. Con más de dos horas de duración se siente cansada en ciertos pasajes, aunque se podría alegar que el director y guionista John Lee Hancock pretende contagiarnos con la desesperación y tedio que sufrieron las tropas y civiles que ocuparon el fuerte tejano de El Álamo en 1836, resistiendo durante trece días el avance de tropas mexicanas que pretendían recuperar el territorio de Texas. La cinta, desde luego, se centra en esa famosa batalla, y en los personajes centrales del drama histórico: el Coronel Travis (Patrick Wilson), joven oficial al mando del fuerte, quien luchaba por el control de las tropas contra el maduro y experimentado Jim Bowie (Jason Patrick) y su famoso cuchillo; David (no le gustaba que le dijeran "Davy") Crockett (Billy Bob Thornton), legendario héroe del viejo oeste cuya mera presencia inspiraba a las tropas, muy a pesar de la humilde opinión que él tenía de sí mismo; Sam Houston (Dennis Quaid), cuya estrategia de retirar a su ejército probablemente causó la masacre en El Álamo, aunque también garantizó la "liberación" de Texas al derrotar a la milicia mexicana en San Jacinto; y desde luego el Generalísimo Santa Anna (Emilio Echevarría), dictador de México y principal villano en la historia de Texas.
Creo que algunos críticos norteamericanos se han quejado de que "El Álamo" no evoca gran sentimiento, y la acusan de frialdad, cuando debería desbordar emoción y fervor nacionalista. Yo, por el contrario, aplaudo la decisión del director, que evidentemente no quiso convertir a su película en una burda caricatura ciegamente patriótica. Claro, es indispensable cierto patriotismo cuando se relata una historia de independencia y liberación, pero al menos se ha buscado un cierto balance, dando su lugar al ejército norteamericano, a los mercenarios "voluntarios", a las tropas mexicanas de Santa Anna, a las tropas mexicanas que pelearon del lado de Texas, e incluso al puñado de esclavos negros que se vieron mezclados en el conflicto. Y si bien esto podría parecer mera "corrección política", destinada a evitar ofensas étnicas, una afortunada consecuencia es que la combinación de esos puntos de vista añaden madurez y diversidad a la obra, invitando al análisis de estos eventos en el contexto histórico de ambas naciones.
Sin embargo, como dije antes, no es necesario profundizar demasiado en estos asuntos para pasar un buen rato con "El Álamo". Las actuaciones son generalmente buenas, destacando a Dennis Quaid como el ambiguo General Houston (mitad vividor borracho y mitad héroe militar); Jason Patric como James Bowie; y especialmente Billy Bob Thornton como David Crockett, un hombre cuyas legendarias y apócrifas hazañas opacaron al enigmático individuo que se escondía tras ellas.
La cinematografía es otro punto a favor, y los escenarios reflejan vivamente el pintoresco pueblo de San Antonio de Béxar a mediados del siglo diecinueve (aunque, incidentalmente, hace años visité El Álamo, y me sorprendió lo pequeño que realmente es). Las escenas de batalla son épicas, pero bien respaldadas por los momentos íntimos de duda, temor y valor de los soldados. Y aunque el nivel de violencia es bastante bajo, y por lo tanto poco realista, puedo comprender que se ha hecho así para no limitar la audiencia de la cinta a sólo adultos.
El famoso director
Ron Howard inició este proyecto, y cuando lo abandonó (supuestamente
porque no le permitieron realizar una versión sangrienta, cien por
ciento realista) quedó en manos del guionista, quien ha mostrado buena
mano al llevar a la pantalla esta complicada historia. Indudablemente tiene
numerosas fallas, pero el hábil elenco, los majestuosos escenarios,
y las dinámicas escenas de batalla contribuyen a que "El Álamo"
sea una competente obra que se puede recomendar, a pesar de su lenta narrativa
y su revisionismo histórico. Pero los historiadores fanáticos,
mejor absténganse de verla, o arriésguense a presenciar, como
siempre, la versión de los ganadores.
Calificación: 7