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El Regreso del Todopoderoso
(
Evan Almighty)
Universal Pictures, 2007
Estados Unidos, 90 minutos

Dirigida por Tom Shadyac
Escrita por Steve Oedekerk, Joel Cohen y Alec Sokolow, basados en personajes creados por Steve Koren y Mark O'Keefe
Editada por Scott Hill

Elenco:
Steve Carell ... Evan Baxter
Morgan Freeman ... Dios
Lauren Graham ... Joan Baxter
Johnny Simmons ... Dylan Baxter
John Goodman ... Senador Long
Wanda Sykes ... Rita
John Michael Higgins ... Marty

Imagen © 2007 Universal Pictures

La original "Bruce Almighty" me pareció una comedia marginalmente ingeniosa, que tomó un concepto dudoso y le dió vida con la certera elección de Jim Carrey en el papel principal. No toda la gente traga a este comediante, pero creo que incluso sus detractores deben admitir que Carrey entiende instintivamente el tono e intención del humor que debe representar, y de inmediato se compromete a sacarle todo el jugo posible. Si eso es bueno o malo, dependerá de cada espectador.

La secuela, "El Regreso del Todopoderoso", no se atreve a ser tan irreverente como la original, y en vez de ello nos receta una blanda fábula moralista disfrazada de religión disfrazada de mercadotecnia (¿cómo?).

Es obvio que dos factores importantes (y relacionados), contribuyeron a la creación de "El Regreso del Todopoderoso": primero, la percepción de que cualquier película con tema pseudo-religioso será un éxito de taquilla. El segundo, que es muy fácil ofender accidentalmente al público religioso. La combinación de estas premisas (reales o falsas; da lo mismo) dió como resultado que toda sombra de travesura e irreverencia abandonara el guión, para ser reemplazada por clichés sentimentaloides y deshonestos; y, consiguientemente, dejando el humor de la película al nivel de la más burda y soporífera comedia televisiva.

Y, qué mejor para compensar esa flojera narrativa que con millones de dólares de efectos especiales.

La trama de "El Regreso del Todopoderoso" se centra en un personaje periférico de la cinta original. Evan Baxter (Steve Carell) era el pomposo comentarista de noticias en una televisora local, pero por capricho del guión se postula como senador y gana el preciado puesto, mudándose con su familia genérica a la ciudad de Washington, donde rápidamente se da cuenta de que su honesta intención de cambiar al mundo no será tan fácil de cumplir, pues la política ofrece muchas trampas y falsos profetas.

Afortunadamente Evan recibe considerable ayuda de Dios mismo (Morgan Freeman), quien le pide construir un arca para prepararse contra un nuevo diluvio. Sobra decir que esta inusual solicitud pondrá a prueba la fe de Evan, no sólo en Dios, sino en su familia y en sí mismo.

Usualmente me gusta mucho el trabajo del comediante Steve Carell, pues es capaz de transmitir melancolía y drama en su comedia (como podemos ver en la versión norteamericana del programa televisivo "The Office") y comedia en su drama (como en la película "Little Miss Sunshine"). Lamentablemente el libreto de "El Regreso del Todopoderoso" ata las manos de Carell, quien en todo momento intenta sacar el mejor partido posible del insípido material. No siempre lo consigue, pero aprecio su esfuerzo. Lauren Graham y John Goodman tienen ingratos papeles secundarios; ella es la sufrida (pero irrelevante) esposa del protagonista, y él es su (irrelevante) rival en el senado. Al menos Morgan Freeman parece divertirse con su papel de Dios, y no hay duda que es uno de los pocos actores que resulta creíbles en ese papel (Bruce Campbell desde luego predomina en esa pequeña minoría).

Habiendo dicho eso, reconozco el atractivo de esta película. No todo el mundo gusta del humor vulgar y "post-moderno" que emplean tantas comedias contemporáneas, y es bueno que la industria del cine busque complacer a segmentos del público que usualmente ignora (aunque sólo sea por causas mercantilistas). Como comedia familiar, "El Regreso del Todopoderoso" es perfectamente inocua y digerible, perfecta para disfrutar con la familia en un flojo domingo... siempre que la familia no espere originalidad en el libreto o ingenio en el desarrollo.

Quizás yo no sea el público que busca "El Regreso del Todopoderoso", pero comprendo su intención, y por eso puedo darle una tenue recomendación, con la seria advertencia de que no hay que esperar la divertida irreverencia de la cinta original, sino la insípida heterogeneidad de un guión complaciente y predecible, que no se atreve a levantar la más mínima controversia ni a desviarse de los rígidos parámetros morales establecidos por quien se encargue de establecerlos. Steve Carell hace lo posible por ampliar el atractivo de la película, pero no basta para sacarla de su blanda mediocridad. Los efectos especiales son vistosos y competentes, y el mensaje apropiadamente edificante. Quien espere más drama o una narrativa más consistente, mejor lea la Biblia.

Calificación: 6

Pablo del Moral

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