Archivo de Críticas:

Lista por título en español en orden alfabético:
(Números, y de la A a la I)
(De la J a la Q)

(De la R a la Z)

Lista por título en su idioma original, en orden alfabético:
(Números, y de la A a la I)
(De la J a la Q)
(De la R a la Z)

Feed
(
Feed)
Becker Films, 2005
Australia, 101 minutos

Dirigida por Brett Leonard
Escrita por Kieran Galvin, Alex O'Loughlin y Patrick Thompson
Editada por

Elenco:
Alex O'Loughlin .... Michael Carter
Patrick Thompson .... Philipp Jackson
Gabby Millgate .... Deidre
Matthew Le Nevez .... Nigel
David Field .... Padre Turner
Rose Ashton .... Abbey
Jack Thompson .... Richard

Imagen © 2005 Becker Films

Desde hace varias décadas disfruto del cine de terror, y por ello estoy bien habituado a los más grotescos espectáculos cinemáticos que se atreven a ofrecer los cineastas especializados en el género. Pero muy rara vez encuentro una película que realmente me afecte físicamente, al mismo tiempo que propone ideas interesantes en un paquete visualmente atractivo y narrativamente sólido. Por eso me complace recomendar la cinta "Feed".

Ciertamente no es perfecta y, aunque la considero narrativamente sólida, en más de una ocasión tropieza con su propia pretensión y con la pesada psicología que enarbola. Sin embargo, aprecio cualquier película de terror que respalda sus grotescas imágenes con interesantes ideas y válidos mensajes.

La trama de "Feed" gira en torno a un inusual fetiche sexual que el Internet ha visto florecer en años recientes. El fetiche es el de la "admiración por la obesidad"... o, más precisamente, el de la relación co-dependiente entre una persona (usualmente mujer) mórbidamente obesa y su "alimentador" (usualmente hombre), quien controla y fomenta el suministro de comida para incrementar el peso de su pareja. O víctima.

En su modo más inofensivo (claro que "inofensivo" es un término bastante relativo), esta actividad se lleva a cabo entre adultos con mutuo consentimiento. Pero cuando Philipp Jackson, ciber-policía australiano, descubre uno de esos sitios en Internet que podría estar encubriendo algo más siniestro, decide investigar, aún sin permiso de sus superiores.

Así llega a los Estados Unidos, donde finalmente encuentra a Michael (Alex O'Loughlin), el carismático operador del sitio "FeederX" que casi convence a Philipp de la validez de las ideas y motivación detrás de la "admiración por la obesidad". Pero el obsesionado detective persiste en su investigación, hasta poner en peligro su vida y la de las supuestas víctimas que pretendía salvar...

El director Brett Leonard no pierde oportunidad para mostrar grotescas y perturbadoras imágenes en "Feed". Pero, emulando hasta cierto punto las películas de David Cronemberg y George A. Romero, el gráfico contenido no se siente forzado o gratuito, pues sirve como respaldo de los precisos y vehementes diálogos que exponen fascinantes ideas sobre muy variados tópicos, desde la arbitrariedad de la belleza hasta el papel de la mujer en la sociedad, sin olvidar, desde luego, la defensa de los fetiches como sanas expresiones de sexualidad humana.

Entonces, el principal logro de la película no es necesariamente provocar nausea en el espectador (aunque ciertamente lo logra), sino ilustrar la hipocresía de una sociedad que no sabe distinguir el abuso en una relación cuando está amparado por la apariencia de normalidad. En otras palabras, lo anormal no radica en el objeto del fetiche, sino en el hambre de control que se esconde aún tras las más inocentes relaciones románticas.

El director Brett Leonard ha tenido una inestable carrera. Luego de innovar el uso de efectos digitales a principios de los noventas en películas de dudosa calidad (como "Lawnmower Man", "Virtuosity" y "Hideaway"), su ritmo de trabajo declinó hasta ocasionales incursiones en televisión (como en el caso de la horrenda "Man-Thing"). Por eso me ha sorprendido su eficiente trabajo en "Feed", que aprovecha al máximo sus escasos recursos para presentar una cinta técnicamente pulida y de atractiva apariencia. Claro, hay abundante uso de filtros y trucos de edición, tan comunes en el cine de terror contemporáneo, pero debido al tono de la película se sienten justificados y hasta complementarios para la trama.

Las actuaciones son un poco teatrales pero eficientes, e igualmente complementan el febril ritmo de la película y sus perversas imágenes. De cualquier forma, los ostentosos y pseudo-profundos diálogos exigen actuaciones igualmente grandilocuentes y aparatosas.

En resumen, "Feed" definitivamente no es para todos los gustos. Por válido e interesante que sea su mensaje, no se puede negar su obvia intención de escandalizar e impactar al espectador. Sin embargo la recomiendo con confianza para cinéfilos que no teman internarse en los más sórdidos caminos de la experiencia humana para aprender algo nuevo. Y, desde luego, para quienes necesiten motivación para comenzar una dieta (como yo).

Calificación: 8

Pablo del Moral

Google
 
Web www.cinencanto.com