El Gurú del Sexo, por Pablo

Es cosa sabida el hecho de que la industria del cine en Hollywood es casi incapaz de cultivar ideas propias, por lo que continuamente están buscando historias en algún otro lugar, bien sea televisión, éxitos previos, o en el producto fílmico de otras tierras. En el pasado esta última área de explotación ha tenido moderado éxito; como muestra inmediata podemos ver la fuerte influencia que en la pasada década tuvo el cine de acción de Hong Kong sobre el cine norteamericano.

Y resulta que ahora Hollywood, en su búsqueda de nuevos clichés y estilos "frescos", está dando tambaleantes pasos rumbo a la asimilación del cine de la India (o "Bollywood"), tratando de moldearlo al gusto occidental. Un claro ejemplo de esto lo tenemos en "El Gurú del Sexo".

Esta película narra la historia de Ramu Gupta (Jimi Mistry), un joven maestro de danza que decide abandonar la India para emigrar a los Estados Unidos, la legendaria tierra prometida, donde su amigo Vijay (Emil Marwa) supuestamente lleva una existencia privilegiada gracias a las grandes oportunidades que ofrece ese país. Pero al llegar, Ramu se da cuenta de que la vida en el nuevo mundo es mucho más difícil de lo que pensaba, y termina trabajando como mesero en un restaurant étnico, al lado de su "exitoso" amigo. Un día, Ramu decide buscar trabajo en la farándula, que siempre fue su ilusión, y acude a una audición para actores, sin percatarse de que está ofreciéndose para trabajar en una película pornográfica. No muy convencido, pero optimista, decide probar su suerte en el género, pero en su primera escena de sexo al lado de la bella Sharonna (Heather Graham), Ramu tiene problemas para "actuar", por lo que es despedido. Sin embargo, no sale con las manos vacías... la guapa actriz porno le ha dado algunos valiosos consejos que impresionan al joven indio. Posteriormente, al intentar recuperar su trabajo de mesero, Ramu improvisa como substituto de un sabio swami, contratado por una adinerada familia para amenizar una elegante reunión. Entonces, el apócrifo gurú aprovecha la oportunidad para convertir los consejos de Sharonna en elevadas perlas de sabiduría, que son ávidamente devoradas por los vacuos y bobalicones millonarios, quienes, ansiosos de profundidad espiritual, aceptan a Ramu como un sabio del Medio Oriente. Nadie se impresiona más que Lexi (Marisa Tomei), una mujer joven y rica, pero sin rumbo fijo en la vida, quien luego de escuchar las palabras del "Swami", decide dedicar su vida a difundir el mensaje del sabio, con la esperanza de que ayuden a otros tanto como la ayudaron a ella. Así, Ramu comienza una nueva vida como líder espiritual, fundamentada en una mentira, y mantenida por las continuas enseñanzas de Sharonna, quien sin saberlo está moldeando la conducta de miles de personas, a través de las enseñanzas del Gurú.

Tengo sentimientos muy encontrados sobre esta cinta; por un lado, el argumento (mezcla de "comedia de errores" y "pez fuera del agua") es muy trillado y las actuaciones son sumamente irregulares. No hay gran originalidad ni sorpresa; el humor es igualmente predecible y del más bajo nivel. Sin embargo, por debajo de la fláccida (ahem) comedia romántica, hay ciertos rastros de verdad y de auténtico drama que, como la sabiduría del Gurú, se alcanzan a filtrar a través de la torpe trama. En sus mejores momentos se atisban notas de sátira social sobre el inherente racismo que abunda en la "tierra prometida". Por ejemplo, un joven pregunta a Ramu y a sus amigos: "¿Cuántas estrellas de la India se conocen en Norteamérica?" La respuesta, a la vez hilarante y dolorosamente cierta, refleja una verdad social que es imposible negar. También funcionan muy bien los comentarios de Michael McKean como Dwain, el cínico director de películas pornográficas, quien difícilmente puede diferenciar a Ramu, que es de la India, de los indígenas norteamericanos. Para él todos los extranjeros pertenecen al mismo grupo étnico amorfo, y sólo son importantes para darle variedad a sus alternativos videos.

Sin embargo estos brillantes chispazos son muy pocos. Además, aunque las actrices son muy guapas y el protagonista tiene carisma y presencia, las situaciones en que los ponen están apenas al nivel de un "sitcom", y si causan gracia no es porque sean inherentemente chistosas, sino porque su estructura es tan familiar que indudablemente invita a la risa, sólo porque reconocemos el cliché.

Y hay otro punto importante... los números musicales. Aunque a mi, en particular, me gusta mucho la música india, no soy muy aficionado a la inserción arbitraria de elaborados números musicales y coreografías que tanto utiliza el cine de "Bollywood". En "El Gurú del Sexo" se hace amplio uso de esta mecánica, y si bien resulta ocasionalmente divertida, el resultado final se aproxima más a la incoherencia. Tal vez la mezcla de sensibilidades orientales y occidentales no dió el resultado esperado; o tal vez la inestable dirección de la película no logró encontrar el balance entre comedia, música y drama.

En general no me arrepiento de haber visto "El Gurú del Sexo", gracias a sus atractivos actores y a la música (sin el baile). Pero como comedia, y peor aún, como comedia romántica, es tan olvidable y en ocasiones embarazosa que no podría recomendarla como buen cine. Quien esté interesado en este tipo de películas, hará mucho mejor en ver la reciente "Monsoon Wedding" o la muy rara "Bollywood/Hollywood". Sin embargo, para no terminar en nota negativa, aún veo esperanzas en la fusión de este tipo de cine con las estériles emociones hollywoodenses. Tal vez se requiere de un mejor director y de un guión más inteligente, pero el potencial está presente. El tiempo dirá si alguien encuentra la mezcla ideal de sensibilidades.

Calificación: 5

Pablo

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El Gurú del Sexo (The Guru)

El Gurú del Sexo
(The Guru)