Killer Films, 2005
Estados Unidos, 91 minutos
Dirigida por Mary Harron
Escrita por Mary Harron y Guinevere Turner
Editada por Tricia Cooke
Elenco:
Gretchen Mol .... Bettie Page
Chris Bauer .... Irving Klaw
Jared Harris .... John Willie
Sarah Paulson .... Bunny Yeager
Cara Seymour .... Maxie
David Strathairn .... Estes Kefauver
Lili Taylor .... Paula Klaw
"La Notoria Bettie Page" es una cinta biográfica de la famosa modelo que en la década de los cincuentas apareció en decenas de revistas y afiches, posando en muy diversas situaciones para públicos muy diferentes. Más populares son sus inocentes fotografías en traje de baño o "topless". Menos conocidas son las imágenes supuestamente pornográficas de Bettie Page que atraían al público más especializado en dominación y sadomasoquismo.
Aunque el sórdido tema podría sugerir una vida rodeada de vicio, degradación y melancolía, la directora Mary Harron nos muestra a Bettie Page (Gretchen Mol) como una joven inocente y religiosa que, simplemente, no asociaba desnudez con perversión. Si había hombres que disfrutaban viéndola con ceñidos corpiños y brillantes botas, blandiendo un fuete... ¿a quién perjudicaba?
Desgraciadamente el resto del mundo no opinaba lo mismo, y así vemos a Bettie (y a sus patrones) mezclada en una investigación gubernamental que trató de determinar qué tan nociva era la pornografía... y qué tan culpables eran los fotógrafos que la creaban y la distribuían.
Como dije, "La Notoria Bettie Page" es ostensiblemente una cinta biográfica, pero en realidad va mucho más allá de ser un mero recuento de la vida pública de Bettie Page, ya que incorpora sutilmente un análisis de la moralidad de aquella época, que se examina con sorprendente objetividad y criterio. Lejos de satanizar a los "pornógrafos" o a los rígidos guardianes de la moralidad pública, Harron y la guionista Guinevere Turner contemplan ambos extremos del debate, aceptando tácitamente sus respectivas fallas y virtudes en un nivel al mismo tiempo práctico y humano.
De ese modo, los fotógrafos de Bettie Page no son perversos monstruos que abusan de las modelos... son simples trabajadores que, siguiendo la ley, crean un producto que algunos consumidores demandan. Y los senadores y jueces que tratan de suprimir tal material presentan puntos de vista válidos que de algún modo deben co-existir en la gris frontera entre perversión y libertad de expresión. En fin, supongo que el debate sigue hasta nuestros días.
Hablando de eso, otro nivel de "La Notoria Bettie Page" es sin duda la nostalgia por una época más inocente, donde la supuesta pornografía consistía en la traviesa sugerencia de feminidad, y no en el explícito desfile moderno de cualquier acto sexual que podamos imaginar. No digo que uno sea mejor o peor que el otro... simplemente que la película propone que quizás la popularidad de Bettie Page (que perdura hasta nuestros días) proviene más de esa nostalgia que de la atracción que genera su imagen.
Durante años se mencionó a Dita Von Teese, Rose McGowan o a Liv Tyler como elecciones obvias para filmar la vida de Bettie Page, pero me alegro que la directora haya elegido a Gretchen Mol. Quizás esta actriz no tenga mucho parecido físico con la modelo, pero creo que el éxito de cualquier cinta biográfica no recae exclusivamente en esa similitud, sino en el talento histriónico necesario para permitir una transformación a nivel emocional y psicológico. En lo personal, yo disfruté enormemente de la actuación de Mol, quien debe enfrentar escenas emocionalmente difíciles sin traicionar el aire de inocencia y seguridad de Page (como cuando le preguntan a la religiosa joven: ¿qué pensaría Dios de su trabajo como modelo?). En mi humilde opinión, el resultado es extraordinario, pues consigue juntar esos aparentemente opuestos polos en un mismo personaje que se siente totalmente creíble y humano, respetando la naturaleza de Page y contribuyendo al sutil mensaje de la película.
Como la modelo misma, "La Notoria Bettie Page" es una película cuyo atractivo superficial oculta una veta de verdad y elocuencia mucho más satisfactoria y emotiva que cualquier simple biografía. El trabajo de Mary Harron (acostumbrada a temas difíciles) es perfecto, tanto en la narrativa como en el estilo visual que derrocha la película, y el guión multidimensional de Guinevere Turner plantea válidas preguntas cuyas respuestas quedan a cargo del espectador. Recomiendo con entusiasmo esta película, no sólo para fanáticos de Bettie Page, sino para quienes disfruten de cine profundo e inteligente, pero no pretencioso. Y, desde luego, para quienes deseen validación de sus "perversas" preferencias sadomasoquistas.
Calificación: 9